Pocos pintores como Alberto Quintanilla han sabido captar con extraordinaria agudeza la realidad y mezclarla con la ficción en una unidad conceptual que explota por los contrastes de cálidos y fríos
Sus obras representan su mundo poblado de seres extraños que hipnotizan, con los recuerdos de su niñez, con las impresiones que le dejaron la visión del campo, los campesinos y sus costumbres ha sabido construir una obra que sin dejar la sencillez del artesano, el candor del campesino, se ha impuesto en el mundo del arte por su maestría.
Galería Germán Krüger Espantoso
Desde el 5 de enero hasta el 18 de febrero
Ingreso libre