Ciclo de cine dedicado al director italiano Gabriele Salvatores desde el 6 de octubre

Mediterráneo (1991): Durante la Segunda Guerra Mundial un grupo de 8 soldados italianos es enviado a custodiar una isla griega que sólo está habitada por niños, mujeres y ancianos. Al desembarcar, tanto la radio como su embarcación se malogran por lo que deberán permanecer en esa isla e integrarse con sus habitantes, olvidándose que se encuentran en medio de una guerra.

Comedia ganadora del Oscar a la Mejor Película en lengua extranjera en 1992 y de tres Premios David di Donatello, Mediterráneo es la conclusión de una trilogía (que incluye los filmes Marrakech Express y Turneé) en el que se combinan un análisis de Italia y de los italianos a partir de estereotipos, con una gran carga de desilusión a la luz de los hechos vistos con 40 años de distancia. No en vano el director aseguró dedicar el filme a “aquellos que quieren huir”.

Io non ho paura (2003): Basada en la novela homónima de Niccolò Ammaniti aparecida en 2001, la película narra la historia de Michele Amitrano, un niño de 9 años que un día debe entrar a una casa abandonada para cumplir un castigo y descubre una historia terrible de secuestro y asesinato.

Salvatores logra llevar a escena, con un realismo sobrecogedor, esta historia de coraje y amistad en la que un niño madura y logra tomar sus propias decisiones al descubrir un lado terrible de los adultos y, con ellos, de la humanidad. Ambientada en el verano de 1978 en Acqua Traverse, un pequeño pueblo del sur de Italia, la película, ganadora de dos premios David di Donatello, muestra también la belleza de los paisajes rurales de esta parte del país europeo.

Italy in a day (2014): Proyecto experimental que reúne una selección de videos realizados por ciudadanos de a pie quienes aceptaron el reto de registrar momentos de su jornada en una fecha específica: el 26 de octubre de 2013. Se enviaron en total 44 mil videos que sumaban un total de 2.200 horas de grabación.

El resultado es un documental que habla de la creatividad y que revalora los pequeños instantes de la vida que van desde una pedida de mano hasta secuencias de acción en vuelo libre, pero recuperando siempre el lado humano. Es una película solar e íntima que habla también de la esperanza.