[Reporte] EXPO ARTE 77, perfilando el rostro de una nueva generación de artistas

EXPO ARTE 77 es una selección de los mejores trabajos de los recién egresados de la Facultad de Arte y Diseño de la PUCP. La muestra se desarrolla en diferentes espacios según especialidades y se puede visitar gratuitamente durante los próximos meses. Visitamos en esta oportunidad las galerías expositivas del ICPNA de San Miguel y del CCPUCP. La muestra recoge una amplia variedad de temas y estilos que nos permiten identificar algunas líneas y ejes conceptuales que repasaremos brevemente a continuación.

Por Paula Eslava Jaime (*)

‘Des-aparición, repetición y des-identidad’ de Ángela Lazo

La selección de obras en EXPO ARTE 77 permite vislumbrar el enfoque y los intereses que han predominado entre los artistas en formación durante el último año, así como intuir una de las direcciones hacia la que se dirige uno de los caminos del arte más joven en Lima. Predomina, por ejemplo, un gran interés por el cuestionamiento acerca del contexto socio-político en el cual están inscritas las obras, aproximándose ya sea desde elementos colectivos comunes en la historia peruana o desde enfoques más intimistas y personales.

En cuanto a los formatos de las propuestas artísticas, si bien en general continúan siendo pensados y enfocados para que funcionen en un espacio expositivo (instalación, escultura, pintura y otros) se observa en algunos casos una cierta voluntad de interacción con el entorno más cercano y remoto, incluso a manera de exigencia, no solo como herramienta del proceso sino como fin último y objetivo.

Un repaso a las propuestas.

En la propuesta ‘Permanencia’ de Bettina Paredes se reflexiona sobre la memoria histórica y profundiza en los procesos de fractura social y olvido. A partir del caso Uchuraccay, del cual recupera imágenes icónicas de los registros periodísticos, la artista saca a la calle una reimpresión ampliada de una de las fotografías encontradas en las cámaras de los hombres de prensa. Este punto propicia la contraposición de sentidos del objeto ahora descontextualizado. Las referencias de lectura del ciudadano de la calle sobre el objeto visual impuesto son parte misma de la obra. Interesante propuesta de proceso, objeto y visualidad con la cual Paredes inaugura su presencia en el espectro expositivo, lo cual reafirma la presencia de una generación de artistas muy jóvenes que continúan apostando por profundizar e investigar visualmente la complejidad de la realidad peruana.

‘Permanencia’ de Bettina Paredes

La obra ‘De la Serie OIGA’ de Benjamín Cieza también dialoga con la memoria colectiva enfocándose en la resignificación de objetos visuales. Mediante la fragmentación de portadas de la revista OIGA de los años ochentas que evocan sucesos y personajes claves de entonces, la propuesta utiliza la técnica del collage para reconstruir lo destruido, pero esta vez agregándole perspectiva a la figura misma de la revista, incorporando además alejamiento y mediación, que hace del objeto “revista” un exponente de su propia naturaleza documental y que evidencia las ironías del tiempo. Una pieza en particular despunta por la fuerza del contenido y forma, se trata de “Profesores de arte se mueren de hambre”, una pieza que sin duda podría ser apetito de coleccionista de arte.

‘De la Serie OIGA’ de Benjamín Cieza

Siguiendo esta línea, la propuesta ‘Educación 90’ de Andrea Beteta busca reflexionar sobre el empobrecimiento, la sobresaturación y banalidad que se enquistaron aquellos años y continúan hasta ahora en los medios de comunicación nacionales. Con ellos creció toda una generación, la del periodo fujimori-montesinos. La propuesta es una instalación que mezcla lo audiovisual con transparencias sobre noticias o emblemas culturales populares en los años 90.

‘Educación 90’ de Andrea Beteta

Ángela Lazo en ‘Des-aparición, repetición y des-identidad’ reproduce sobre una tela de gran formato el mismo dibujo de rostro femenino repetido, sobre el cual se pueden ver los restos estampados de diversos rostros maquillados. Esto lo acompaña con una serie de maniquíes y máscaras de silicona, moldes de la misma persona. Una obra que remite a los paneles de desaparecidos buscados por familiares, que nos evoca la actualidad más oscura de nuestra historia reciente, en donde la identidad individual se va diluyendo para convertirse en un “todos” de la misma persona y nadie a la vez.

‘Des-aparición, repetición y des-identidad’ de Ángela Lazo

Desde un enfoque más íntimo, pero manteniendo la tendencia de esa voluntad de diálogo abierto con el contexto, destaca la obra de Romina Schulz, formada por dos cartografías ‘Tierra incógnita: cartografía familiar’ y ‘Tierra incógnita: mapa mundo’ en las que utiliza la técnica de la costura para esconder y desvelar confesiones de violencia, desavenencias domésticas y trazar mapas de cuerpos interrelacionados. Propuesta que evidencia la versatilidad de la autora en recuperar desde el viaje interior aquellos elementos de mayor fuerza emocional que apelan a lo más universal de una historia personal y se nos presentan a manera de puentes que conectan con emociones universales.

‘Tierra incógnita: cartografía familiar’ y ‘Tierra incógnita: mapa mundo’ de Romina Schulz

También se pueden encontrar trabajos con un carácter más autoreflexivo sobre el propio medio como la propuesta ‘Bordieu, Acha y Gullar’ de Gustavo Gonzales en el que se compone una especie de mapa conceptual, de relacionamiento de ideas, formado por frases y máximas de los pensadores que dan título a la obra. Las reflexiones seleccionadas atraviesan al arte y los artistas frente a la sociedad. Todos estos carteles se van conectando unos a otros mediante un ovillo de lana cuyo final se sitúa en el suelo, como si estuviera invitando al espectador a completarlo o realizar sus propias conexiones.

‘Bordieu, Acha y Gullar’ de Gustavo Gonzales

Otra de las propuestas que llaman la atención es la instalación e intervención en el espacio público ‘Proyecto HAGA (arte grabado ambulante)’ en la que Diana Arteaga nos muestra la experiencia de sacar el arte a la calle y liberarlo de su usual elitismo y aureola intelectual e institucional. Para este fin presenta un carrito ambulante que oferta arte para hacer, consumir y llevar. El proyecto aterriza así la acción del arte del grabado mediante el uso de sellos y esténcil, con colores y diseños adaptados y pensados de acuerdo a la estética de la calle con la que pretende interactuar.

‘Proyecto HAGA (arte grabado ambulante)’ de Diana Arteaga

En la instalación “Intuición y tiempo” de Raquel Marambio se explora acertadamente a través de una serie de paneles interpuestos sobre la naturaleza omnívora del tiempo, es una especie de acorralamiento del interlocutor, una envoltura visual de 360 grados que nos arroja al universo o a las profundidades del mar. Auspiciosa propuesta que merecería una serie de condiciones en la sala para apreciar mejor el objetivo de soledad e introspección por las que apuesta.

“Intuición y tiempo” de Raquel Marambio

Queda remarcar que este reporte es solo un breve repaso panorámico y no abarca las diversas propuestas que contiene la exposición, en donde confluye la diversidad, originalidad y la apuesta por profundizar en los grandes temas. Son propuestas de jóvenes artistas en el inicio de sus carreras, que abarcan intereses y estilos muy diversos. La muestra general, que usted no puede perderse, es sin duda una interesante pista de lo que se viene gestando con energía en la escena artística limeña.

* Colaboradora de INFOARTES, es egresada de Bellas Artes en la especialidad de Pedagogías Culturales de la Universitat de Barcelona.

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