[Entrevista] Franchesca Tapia del IIAPERU sobre la investigación en artes en el Perú

En el campo de las artes existe un actor y una actividad clave en el proceso de reconocimiento de la riqueza de la diversidad artística: el investigador de las artes. Sobre su actividad, la investigación, recae la responsabilidad del análisis y la comprensión, la generación del conocimiento sobre la obra, su proceso, su contexto e interrelaciones. Pero, ¿cuál es la agenda de la investigación y el investigador en artes en la sociedad de hoy que no le reconoce su vital importancia? Para reflexionar sobre estos temas hablamos con  la historiadora de arte, Franchesca Tapia, directora del Instituto de Investigación de Arte Peruano IIAPERÚ quien nos recuerda que el desconocimiento es peligroso: destruye patrimonio cultural, atropella y mutila la libertad artística y nos desvincula de nuestra identidad cultural.

Los investigadores son vistos generalmente como los que intelectualizan la sensibilidad…

Muchos creen que los investigadores, porque no somos artistas, no sentimos las obras o no nos vinculamos con ellas. El investigador es el que teoriza, el que hace más complicada las cosas. Pero la verdad es que no es así, nosotros estamos acá para sacar lo esencial y a partir de la investigación demostrar la importancia de esa obra de arte en la sociedad. Ese es nuestro papel.

La investigación en general en nuestro país está en una situación de constante debilitamiento. Por otro lado también el campo de las artes sufre ciertas amenazas.  ¿Consideras que existen instituciones que impulsen la investigación en el arte como parte del fortalecimiento del conocimiento sobre las artes en el Perú?

En realidad el estudio de las artes ha sido muy descuidado durante muchísimo tiempo porque no se reflexiona en torno a ello. No hay espacios en donde los investigadores podamos dar opiniones o comentarios acerca de lo importante que son nuestros trabajos para todos, para la sociedad, para los científicos, para el público en general y también incluso para los artistas.

Aunque ahora hay muy buenas iniciativas en diversas instituciones por impulsar la investigación en el arte, aún son pocas. Por ejemplo, Bellas Artes ha creado su Instituto de Investigaciones de Artes Visuales donde la idea es hacer investigación en los campos visuales y formar estudios. Las diversas maestrías de San Marcos, la PUCP, la Universidad Peruana de Arte Orval  que ahora también se ha sumado a esta iniciativa de investigación por el arte, también tienen la intención de hacer investigaciones porque existe muchísimo material por investigar. Estamos hablando de materiales que incluso se encuentran en bóvedas.

Las publicaciones no son tan numerosas como deberían ser. Si bien es cierto hay muchos fondos editoriales que apuestan por la investigación del arte todavía no cubren el vasto producto cultural que nosotros tenemos a nivel nacional. Entonces si solamente nos situamos en Lima, lo que hacen los fondos editoriales y lo que tratamos de hacer nosotros desde nuestra cancha, es justamente tratar de impulsar  estas piezas  y que se conozcan porque mientras más guardadas estén va a ser peor.

Cuántas publicaciones estiman anualmente que se realizan en investigación en arte.

He asistido a cuatro presentaciones en el año como máximo. Es que sacar una publicación en arte implica un gran presupuesto. Para empezar está el trabajo del investigador que tiene que analizar su objeto de estudio, armar un proyecto en base a eso y revisar las piezas. Estamos hablando de un proyecto que tiene que durar de cuatro a seis meses como mínimo, si es que no se tienen los recursos para movilizarse, acceder a archivos y a las piezas. Una de las partes más difíciles de un investigador es acceder a las piezas porque muchas de éstas se encuentran en instituciones privadas y en instituciones públicas que tienen un rígido reglamento para el acceso a las mismas.  Otras se encuentran en bóvedas de bibliotecas y museos y no se encuentran al acceso del público en general. Para poder acceder a ellas tienes que hacer todo un trámite que demora por lo menos de dos a tres meses en los cuales pierdes mucho tiempo y dinero y si no te financian esa investigación se vuelve más difícil.

El investigador independiente es el que tiene el trabajo más pesado de todos los investigadores. Es por eso que el Instituto de Arte nació para dar apoyo institucional a todos los investigadores que lo necesiten y puedan continuar sus estudios y armar sus publicaciones.

¿Cuál sería la importancia de la investigación en artes en la sociedad? Es decir ¿qué rol cumple la investigación de las artes en general?

El rol social principal de la investigación es, sin duda alguna, llevar la información adecuada, generar y fortalecer los conocimientos culturales de la sociedad. Por ejemplo, todos los libros que se consultan fueron escritos por investigadores -historiadores, historiadores del arte, antropólogos y más- que, desde sus distintas disciplinas, aportan sus diversas metodologías para el estudio de las artes, de la cultura y del patrimonio.

Estamos hablando de un impacto positivo para la sociedad. Específicamente ¿cuál sería este impacto?

El fortalecer conocimientos culturales y también generar identidad. Como dicen por ahí: tú no puedes amar algo que no conoces. El conocimiento para amar ese “algo” lo propiciamos nosotros, los investigadores.

Y del otro lado, ¿cuál sería el impacto de la investigación en la actividad artística misma, en los artistas y las obras de arte?

El artista en la actualidad es un profesional que se documenta y estudia. Eso alimenta a futuro su producción artística porque lo ayuda a crecer. Parte del crecimiento artístico de una persona que se quiera dedicar a la pintura, escultura, teatro, cine, fotografía, es gracias a la creatividad pero esa actividad también se alimenta de los nuevos conocimientos y las nuevas experiencias. Y si estos conocimientos están ligados a una muy buena investigación previa entonces el producto final va a ser algo original, inédito y va a tener un impacto positivo para todos. Mientras más conoces más aprecias lo que hay alrededor y creces como individuo.

Ahora, la palabra investigación en el arte tiene bastantes perspectivas y horizontes por abordar. ¿Qué diferencias encontrarías entre una investigación que realiza un artista, por ejemplo, con su cuerpo, a una investigación que pueda realizar un especialista sobre un proceso artístico en algún momento determinado del tiempo?

Las diferencias son las finalidades del estudio. Un artista va a investigar para producir una obra de arte, investiga los antecedentes, qué otros artistas han hecho lo que él quiere hacer, qué otros movimientos o tendencias se han producido antes de él o qué es lo que se está haciendo actualmente hoy día. También va a investigar cómo trabajar el material o la técnica. Esa es una investigación para producir una obra artística que también es conocimiento. Hay muchos artistas que a futuro han publicado cómo ha sido su proceso de investigación y eso ha sido muy rico para los futuros artistas que también han seguido esa línea. Muchos de Bellas Artes han hecho eso por ejemplo.

Por otro lado está el investigador que ve el producto final del artista y en base a eso lo estudia para ver el porqué este aporte es único e importante en el campo de la historia del arte. Para eso los investigadores hacemos un proceso de selección. Los historiadores del arte fijamos todo el panorama y vemos si algo puede ser considerado arte o si algo está en proceso de creación. La investigación hoy en día  se puede utilizar para varias cosas: para producir obras de arte, para  informarse, para generar nuevas teorías o ideas acerca del desarrollo del arte. Entonces ya podemos hablar de un trabajo multidisciplinario que incluiría también a críticos de arte, curadores, artistas entre muchos más.

Cuando hablamos de un investigador en artes estamos hablando de un perfil donde también entran especialistas que no necesariamente han seguido la rama de historia del arte, pueden entrar los antropólogos, los sicólogos, etc. Entonces la disciplina finalmente es múltiple y variada a la hora de abordar las artes.

Claro que sí. Ahora estamos hablando de un enfoque multidisciplinario en las ciencias, en las artes, en todo. Prácticamente ahora ya no es que un especialista que se dedique solamente  a su área y se quede ahí. Es más, se considera que una rica experiencia científica se caracteriza por ver otras disciplinas y alimentarse de otros conocimientos, claro que cada disciplina debe respetar su propia metodología pero al estar en contacto con otras metodologías, ésta crece y termina siendo algo más fructífero. Por ejemplo, en la Universidad Autónoma Nacional de México (UNAM), las publicaciones que hace el Instituto de Investigaciones Estéticas sobre los murales mayas están redactadas por diversos especialistas, antropólogos, historiadores del arte y más.

Cómo encuentras la agenda de desarrollo de la investigación en arte en el Perú

En proceso, definitivamente. Para empezar, si bien es cierto hay escuelas de formación para historiadores del arte en San Marcos, la PUCP, ahora Orval y de seguro muchas universidades más se van a animar por la carrera, todavía nos falta algo muy importante que radica en cómo podemos estudiar las artes y particularmente cómo estudiar el arte peruano, cómo crear vías o metodologías para poder hacer un verdadero estudio del arte peruano que es muy diverso y complejo. Acá hay mixtura, diversidad.

También hay escuelas de arte que están creando sus unidades de investigación. El Centro de Folclore José María Arguedas tiene una  unidad de investigación de muchos años y me parece que ahora las escuelas de arte que están asumiendo el rango universitario también están en un proceso de generar este tipo de producción académica.

Hay un proceso de reconocimiento al valor de la investigación en el campo de las artes. Los mismos artistas y los mismos centros educativos, universidades y demás se están dando cuenta que la investigación es algo muy importante porque es la génesis de todo. El trabajo que hace el investigador es el que nos da los conocimientos  a futuro para poder crear, entonces es algo que necesita de facilidades para que se pueda desarrollar bien.  Si en un país no se investiga, no se genera conocimientos y si eso no sucede lo que vamos a producir en la sociedad es que se repitan errores, no vamos a formar un vínculo con la cultura y el patrimonio y finalmente los lazos se van a romper. También hay un factor fundamental que es el reconocimiento del valor de las expresiones artísticas en el desarrollo del país.

Además hay una invisibilización de los investigadores. Incluso en los medios de comunicación ni siquiera se les consulta, en temas complejos lo lógico es consultar a un especialista del tema, y sin embargo no es así.

Exacto. Así como llaman a un arqueólogo para hablar acerca de cómo fue intervenido un centro arqueológico, así deberían llamar también a un historiador del arte para hablar acerca de lo que le compete. Hay mucho desconocimiento por parte de los medios de comunicación que en parte tiene que ver porque los mismos historiadores del arte tenemos dificultades para producir investigaciones y para incidir en el medio.

Justamente sobre ese tema, ¿qué pasos crees que se deberían dar desde el ámbito privado y público, desde la universidad  hasta las organizaciones de la sociedad civil?

Las universidades que ya están formando historiadores del arte o investigadores que se van a dedicar al campo visual, ellos deben fortalecer la promoción de investigaciones y sus publicaciones. Deben dar facilidades y formar bien a sus estudiantes para que se destaquen en el campo de la investigación científica en las artes. A partir de ahí y dando oportunidades para que se desarrollen, vamos a tener una mejor generación de investigadores que van a destacar y estudiar diversos proyectos a nivel nacional. Lo de las prácticas por ejemplo. No hay prácticas para investigadores, uno tiene que hacer su propia investigación.

Y cómo podría ser una práctica para investigadores.

Ahí es donde salen las relaciones y los convenios, una universidad “x” puede formar un convenio con un museo “x” y decir: tengo un grupo de investigadores que quieren hacer un estudio sobre tal colección de piezas que tienes, para empezar. Entonces armas un convenio y haces una publicación, lo difunden adecuadamente y esa sería una estupenda práctica pre profesional. Antes de que el estudiante salga al campo de la investigación ya está preparado y cuando sale solamente tiene que repetir el proceso, eso no ocurre todavía.

En el tema de los incentivos al investigador, ¿qué consideras que nos falta cubrir con respecto a experiencias tan cercanas como Chile, Argentina o Colombia, países que tienen agendas bastante desarrolladas?

El Estado debe abrir un financiamiento para las investigaciones. Hoy en día han abierto financiamiento para las investigaciones en ciencias exactas. Sin embargo, no se puede descuidar la parte cultural histórica. Considero que debe existir un presupuesto por parte del Estado para que se puedan desarrollar investigaciones sobre arte, cultura y patrimonio. El Estado se va a beneficiar de esto porque a final de cuentas todos  van a conocer la riqueza que hay a nivel nacional, se van a generar nuevos conocimientos, la sociedad se va a cultivar de ellos y vamos todos a ser mejores ciudadanos. Estamos hablando de un progreso que sí es factible y que tiene un rendimiento a futuro.

En el caso de la investigación del arte en el Perú y su diversidad y complejidad, ¿qué paradigmas de investigadores encuentras?

Hay muchos investigadores que tienen una amplia experiencia desde la arqueología, antropología, la historia, la historia del arte también. Tenemos a Francisco Stastny, padre de los estudios del arte colonial. Actualmente existen grandes personajes que aún siguen haciendo investigaciones como el doctor Federico Kauffman, por ejemplo. Muchos de ellos han tenido que buscar financiamiento, buscar otros estudios, financiarse los viajes. Han logrado conseguir varias cosas, pero lamentablemente eso no es así para todos. Estamos hablando que todos los años egresan por lo menos unos cien investigadores y solamente uno o dos pueden realmente ejercer su oficio como investigador.

El investigador independiente está a viento y marea tratando de lanzar un proyecto que en realidad se convierte en proyecto de vida.

Exacto, incluso hay proyectos de investigación que demoran años, no porque el objeto de estudio no sea importante sino porque las facilidades que tiene el investigador son limitadas.

Y muchas veces muchos de ellos realizan investigación sobre procesos peruanos fuera del país.

Si, exacto. Lo hacen porque en el extranjero sí hay facilidades para la investigación. Incluso existen muchas becas para investigadores peruanos en Alemania, España, Francia, Inglaterra y EEUU. Por ejemplo en EEUU practican la dinámica de financiar toda la investigación en tu país pero la publicación y difusión la tienes que hacer allá, no lo puedes hacer aquí. En parte es positivo porque el investigador tiene todas las facilidades, pero nefasto y grave por otro lado porque esa información no llega acá. Incluso está en otro idioma y finalmente no va a llegar a la sociedad. Va a ser un libro más en una biblioteca extranjera que va a fortalecer los conocimientos de otra sociedad, en otros procesos y aquí nos vamos a perder de toda esa valiosa información por no haberle dado facilidades al investigador para que haga investigaciones en su país y publique aquí y lo difunda en los medios de comunicación aquí.

¿Entonces podríamos decir que se están exportando investigadores?

Se está exportando conocimiento, lo cual es grave porque eso no va a alimentar a nuestra sociedad. Cuando uno solicita apoyo se da con la sorpresa de que no existen vías de apoyo, entonces uno está atento a estas convocatorias extranjeras y simplemente lo que hacemos es aceptar. Claro que para poder llegar a estas convocatorias se tiene que pasar por todo un proceso que nosotros estamos a la altura de pasar. Si la formación que tuviéramos en la universidad no fuera buena, no tendríamos tantas becas, pero se da porque nuestro nivel académico es alto. Y esa es la visión que tienen en otros países y es lo que aprovechan. Acá se debería tener visión, que es en realidad el problema de muchas partes administrativas, la falta de visión.

Es una verdadera lástima porque mucho conocimiento se va y al final la ignorancia es lo que queda y la ignorancia es peligrosa: destruye Huacas, patrimonio, te desvincula con tu identidad cultural. Y cuando quieres trabajar con la sociedad te das cuenta que es una sociedad que no lo entiende, no porque sean vándalos sino porque nadie los ha educado, nadie les dio la información. Suele aparecer en las redes sociales noticias sobre invasores que ocasionan destrucciones en las Huacas. En mi opinión si ellos invaden es porque tienen necesidad y porque nadie les ha informado la  importancia de ese sitio. Allí está el gran valor social e importancia de la investigación y los investigadores

La situación de abandono en la que se encuentran las artes en nuestro país se debe a muchos factores, entre ellos el desconocimiento, por parte de la ciudadanía, de la importancia del arte para la sociedad. 

Exacto. Es la ignorancia en su máxima expresión. Esa ignorancia es debido a una falta de educación originada a una falta de inversión en la producción de conocimientos culturales. Si se armaría todo un plan educativo, porque todo esto se empieza desde el colegio, las cosas serían distintas. El mejor caso que tenemos en nuestro país se presenta en la costa norte. Walter Alva ha hecho un gran trabajo con la sociedad. Entonces queda claro que sí se puede trabajar con la sociedad, ellos mismos se encargan de cuidar su patrimonio. Es viable, lo único que nos falta es visión y voluntad de hacer cosas concretas.

Eso se puede considerar en los casos patrimoniales, en el caso de la creación contemporánea ¿podríamos decir que, al no contar con nueva información, solo se repite y copia?

Incluso mucha de esa información es falsa. Hay mucha información que se populariza y no es cierta, por eso siempre es bueno llamar a un especialista en el campo. Muchas veces se cometen grandes errores en patrimonio por ese motivo.

Desde tu punto de vista, quiénes consideras que son los investigadores que dejaron un impacto positivo en el reconocimiento de la diversidad artística en el país. José María Arguedas podría ser uno de ellos en el campo de la musicología por ejemplo…

Claro. A José María Arguedas se le conoce bastante en el mundo literario, sin embargo no es muy conocida su faceta como investigador. Debemos recordar que realizó estudios de piezas y realizó una serie de publicaciones y registros. Muchos de ellos se perdieron pero lo que quedó ha sido una gran producción que incluso a muchos de nosotros nos sirve bastante. Él no solamente fue a estudiar las piezas in situ sino también habló con la comunidad. Tomó en cuenta las tradiciones orales, hizo un registro completo de la música, la danza, los trajes. Hizo todo un trabajo científico que al final tuvo un buen resultado.

Y en el caso de los investigadores vivos que siguen produciendo, ¿Quiénes se te vienen  a la mente?

El nombre que viene a mi mente es Federico Kauffman Doig, porque los estudios que ha hecho de arqueología en la selva han sido únicos y muy difíciles. Poder acceder a estas piezas y conseguir el financiamiento para el estudio arqueológico y finalmente para producir las investigaciones y las publicaciones debe haber sido todo un esfuerzo.

En el caso de investigadores de arte contemporáneo.

Considero que existen estudios y teorías debido a que hay mucho material disperso. Alfonso Castrillón sin duda es el máximo investigador en el campo de las artes. El ha logrado hacerse de un nombre pero en sus primeras etapas tuvo dificultades. Otro destacado investigador  es José Sabogal que  tiene investigaciones sobre arte popular, Pablo Macera también. Francisco Stastny, en el Arte Colonial, Ricardo Estabridis, Martha Barriga. La doctora Nanda Leonardini ha hecho muy buenas investigaciones con estudiantes. Ella los ayuda a publicar, incluso el primer artículo que los estudiantes realizan en la universidad es con la profesora. Sin embargo aún falta mucho por hacer, recién estamos empezando.

¿Cómo nace el Instituto de Investigaciones de Arte Peruano que actualmente diriges?

El instituto nace de la iniciativa de un grupo de egresados de la carrera de Historia del Arte de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Cuando éramos estudiantes, Karla Mallma y yo (las fundadoras) siempre reflexionábamos acerca de la importancia del rol del investigador en la sociedad y también en el desarrollo en el campo de las artes y demás. Entonces de estudiantes realizábamos congresos, coloquios, encuentros académicos en donde investigadores compartían experiencias en las que intercambiaban opiniones, comentarios, estudios, etc. Eso nos hizo dar cuenta de la importancia de una plataforma que esté al servicio de los investigadores para que puedan hacer estudios y tener las facilidades para hacer publicaciones. En nuestra etapa estudiantil nos dimos cuenta que no había una institución exclusivamente dedicada a la investigación del arte peruano en general, esto incluye artes visuales, pintura, escultura, dibujo, música, danza, teatro. En realidad la investigación de las artes es un campo muy abierto que incluye muchas áreas importantes. Hay muchos jóvenes que se inician siendo estudiantes y tienen muy buenas ideas y proyectos de investigación pero les falta apoyo institucional. Es por eso que muchas ideas se quedan y se van perdiendo. Nuestra meta a futuro en el IIAPERÚ es poder dar asesoría al investigador, al que recién está empezando.

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