IDENTIDADES DIVERGENTES, exposición de los alumnos premiados de la Escuela Nacional de Bellas Artes. Hasta el 22 de febrero.
El Centro Cultural de la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú (ENSABAP) tiene en actual exhibición pública a IDENTIDADES DIVERGENTES, una importante exposición que reúne obras de los alumnos premiados en las especialidades de Grabado, Conservación y Restauración, Escultura, Pintura y Docencia.
Conozca hoy a los jóvenes artistas peruanos que se perfilan para hacer historia. La muestra está conformada por: Betsy Aliaga (Primer Mención Honrosa- Docencia), Allison Carrasco (Medalla de Plata – Restauración), Juan Mario Canchuricra (Medalla de Oro – Escultura), Roberto Cáceres (Medalla de Plata – Pintura), Sebastián Díaz (Proyecto Destacado), Elizabeth Cordero (Medalla de Oro – Docencia), Emilio Longhi (Medalla de Plata – Escultura), Millard Llanque (Segunda Mención Honrosa – Escultura), David Merino (Medalla de Oro – Grabado), Lisset Moreno (Segunda Mención Honrosa – Docencia), Lincol Agui (Segunda Mención Honrosa – Pintura), Sara Orosco (Primera Mención Honrosa – Pintura), Henry Ortiz (Premio Interdisciplinario), Johan Rodríguez (Terera Mención Honrosa – Escultura), María Luisa Sarango (Primer Mención Honrosa – Escultura), Margot Seytuque (Medalla de Oro – Restauración), Daniela Zambrano (Segunda Mención Honrosa – Premio Interdisciplinario) y Natalia Zúñiga (Medalla de Plata – Grabado).
Hasta el 22 de febrero de 2015
Centro Cultural de Bellas Artes. Huallaga 402, Centro Histórico de Lima.
Horario de galería de martes a domingo de 10 am a 1 pm y de 2pm a 7 pm.
Premios Especialidad de Escultura
Premios Especialidad de Grabado
Premios Especialidad de Pintura
Premios Interdisciplinario
Premios Especialidad de Conservación y Restauración
Premios Especialidad de Docencia
Texto curatorial de Sophia Durand
Compromiso adquirido
Ser un alumno destacado en toda escuela de arte es un logro y un compromiso vitalicio con la institución, pero por sobre todas las cosas un pacto consigo mismo. No es la legitimación de un fulgurante porvenir pero es la reafirmación personal de una identidad. Este estado identitario nunca terminará de nutrirse de su contexto si es que el artista está alerta, pero perecerá si se deja ensombrecer por el mismo sistema. Para Walter Benjamin el término “compromiso” en la creación reúne tres cosas muy claras: militancia, conciencia social y claridad de las metas para un mejoramiento de su entorno. Es una gran responsabilidad artística que no se debe olvidar.
Y es que el arte está en esa zona franca donde se puede hablar de todo con todos y, en este acto, subvierte la realidad latente, abriendo paso a las preguntas y no a las respuestas como muchos pretenden obtener frente a él. Parafraseando a Luis Camnitzer, el buen arte se lanza a lo ignoto, dinamita las bases de lo ya establecido, y “juega con especulaciones y conexiones consideradas ‘ilegales’ en el campo del conocimiento disciplinario”. Las escuelas de arte son, o deberían ser, las responsables de inducir a esta exploración; motivar la experiencia de vivir, descifrar y ser re-creadores de esta. Y creemos estar muy cerca a ello desde estos resultados finales.
“Identidades divergentes” es una exposición que pretende infiltrar los cuestionamientos de una generación que sale de las aulas para enfrentarse a esta nueva realidad: la profesional. No vulnerable, ni inocente, sino todo lo contrario. Esta nueva promoción de artistas multidisciplinarios evidencia gestos distintos el uno del otro, pero todos interrogan y ponen sobre la mirada del espectador inquietantes resultados.
Se cierra un capítulo y con él surgirá en los libros de la historia del arte peruano el expectante cuestionamiento: ¿cuál fue el compromiso de estos artistas y su aporte para su sociedad?
A tenerlo presente todos nosotros como comunidad.